Todos los peques se sienten atraídos ante la idea de poder disfrutar de los videojuegos y los adultos sabemos que resultan muy divertidos. La duda se genera cuando nos planteamos si será recomendable ofrecerlos desde el punto de vista educativo.
La respuesta es que sí. El uso de videojuegos proporciona múltiples ventajas tanto para los peques como para los adultos, y los posibles inconvenientes que se les atribuyen son fácilmente evitables haciendo un buen uso de ellos.
Las ventajas que les aportan los videojuegos
Sirven para desarrollar o mejorar la atención, la memoria y la concentración, que son necesarias para que se produzca cualquier aprendizaje. Además, mediante su uso se puede mejorar la orientación espacial, ya que dependiendo del juego elegido, los peques tienen que moverse por diferentes escenarios y llegar de unas zonas a otras utilizando todas estas habilidades.

Permiten experimentar mejorando la coordinación óculo-manual, que se utiliza en actividades como la escritura, en las que nuestros ojos informan al cerebro de la posición de nuestra mano y la calidad de lo que escribimos, o para abrir una cerradura en la que necesitamos encajar la llave en el lugar exacto y de forma correcta, por ejemplo. Además mejoran la rapidez visual y los reflejos y fomentan la capacidad para resolver problemas y tomar decisiones, permitiéndoles aprender de los errores de forma positiva, ya que pueden variar sus decisiones en próximas partidas de forma lúdica y divertida, lo cual les resulta muy enriquecedor y motivante.
Todo ese aprendizaje que se experimenta jugando se traslada a la vida real, por ejemplo, a la hora de realizar deportes, en el parque, en el ámbito escolar, e incluso en el caso de los adultos a la hora de conducir.
Papás y mamás debemos elegir bien los videojuegos
Dependiendo del tipo de juego elegido se puede fomentar la imaginación y la creatividad, ya que hay numerosas opciones que permiten a los peques crear sus propios escenarios e interactuar con los personajes. Además, eligiendo títulos en los que puedan jugar en equipo se experimenta el aprendizaje cooperativo. No todos los videojuegos fomentan la competitividad, que es otra idea extendida sobre ellos, existen numerosas opciones de juego en equipo, pudiendo ser con otros jugadores de su edad o con adultos, en familia por ejemplo.

Todas las ventajas citadas hasta ahora parecen atractivas pero aún así podríamos estar pensando, como mamás y papás, que en muchas ocasiones hemos escuchado que los videojuegos fomentan la obesidad y el sedentarismo. Sin embargo existen muchísimos juegos que fomentan la actividad física desde hace ya varios años. Podemos pensar en los juegos de baile, por ejemplo, en los que los peques o toda la familia además de divertirse un montón no paran de moverse. Gracias a los sensores de movimiento incorporados en las nuevas consolas la forma de jugar ha cambiado.
A veces también hemos escuchado que fomentan comportamientos inadecuados o agresivos. Esta idea es fácilmente evitable con un buen uso, y es tarea de los adultos asegurarnos de los contenidos que les proporcionamos a los peques y no ofrecerles juegos que no resulten adecuados para su edad. Igual que debemos guiarnos por la orientación de edad en las series o películas que ven, con los videojuegos también tenemos que seguir la recomendación del mínimo de edad necesario para acceder a ellos.
Disfrutar de los videojuegos en familia
Por último, si queremos aprovechar todas las ventajas que pueden ofrecerles los videojuegos a nuestros peques, evitando los posibles inconvenientes, debemos ser conscientes de la necesidad de que aprendan con nuestra ayuda a hacer un buen uso de ellos. Que disfruten de contenidos adecuados y que los peques sean conscientes de la importancia de regular el tiempo de juego, para que no sufran cansancio visual por un uso prolongado o excesivo, o que dejen de realizar otras actividades.

Lo ideal es que los peques puedan jugar con los videojuegos como hacen con diferentes juegos y juguetes, no deben sustituir las visitas al parque, puzzles, juegos de mesa, manualidades, etc. Deben utilizarlos como un complemento más en su aprendizaje, que pueden ofrecerles numerosas ventajas aplicables a las actividades que realizan en su día a día.
un buen punto de vista